miércoles, noviembre 30, 2016

ahora suena pour le piano, en versión de gieseking.

recuerdo la partitura fotocopiada y anillada. arrugada. manchada. una cinta con la grabación por ¿zoltán kocsis? las notas diáfanas, ligeras. hormigas marchando sobre el atril. ¿cómo es posible que alguien pueda tocar eso? ¿cómo es posible que pretendan que yo estudie esa obra? hay cascadas de agua y espejismos por todas partes.

...

números en el excel.

...

hace mucho tiempo que no fumo.

...

suena el teléfono y apenas me doy cuenta porque la música me impide escuchar lo que pasa fuera. alguien va a preguntarme algo que no voy a poder contestar en algún momento.

acá los chicos sub cuarenta usan auriculares y puertas cerradas lo que habilita a las personas mayores como yo a hacer otro tanto: hoy todo el día el piano con la loca de marta argerich y esas ganas de arrasar con todo, con el mundo, con la literatura, con la vida.

hay días en los que tengo miedo: siento el estómago pegado a la espalda.


nabokov &  mariposas.
el cuerpo quieto.
la infancia que se va inexorablemente.

viernes, noviembre 25, 2016

pale fire

cuánto tiempo hacía que no deseaba como loca el momento de retomar una lectura. contar el tiempo para volver a un libro. me pone tan feliz este deseo de enfermarme de literatura nuevamente. entonces ando con cuarenta libros encima, crimen y castigo (para repasar), el de zweig, la biografía de kinski (va a quedar para otro momento), pale fire (libro, fotocopias, anotaciones).

leer dostoievski me da ganas de leer más.

leer a nabokov me da ganas de escribir. otro ruso, más europeo, menos salvaje (por lo menos en el estilo) que el condenado a siberia.

al sol, leo estas verdades acerca de la belleza de las mujeres, de la expectativa de la belleza física.

She might have been you, me, or some quaint blend:
Nature chose me so as to wrench and rend
Your heart and mine. At first we'd smile and say:
"All little girls are plump" or "Jim McVey
(The family oculist) will cure that slight
Squint in not time." And later: "She'll be quite
Pretty, you know"; and trying to assuage
The swelling torment: "That's the awkward age."
"She should take riding lessons," you would say
(Your eyes and mine not meeting). "She should play
Tennis, or badminton. Less starch, more fruit
She may not be a beauty, but she's cute."

It was no use, no use. The prizes won
In French and history, no doubt, were fun;
At Christmas parties games were rough, no doubt,
And one shy little guest might be left out;
But let's be fair: while children of her age
Were cast as elves and fairies on the stage
That she'd helped paint for the school pantomime,
My gentle girl appeared as Mother Time,
A bent charwoman with a slop pail and broom,
And like a fool I sobbed in the men's room.


Another winter was scraped-scropped away.
The Toothwart White haunted our woods in May.
Summer was power-mowed, and autumn, burned.
Alas, the dingy cygnet never turned
Into a wood duck. And again your voice:
"But this is prejudice You should rejoice
That she is innocent. Why overstress
The physical? She wants to look a mess.
Virgins have written some resplendent books.
Lovemaking is not everything. Good looks,
Are not that indispensable!" And still
Old Pan would call from every painted hill,
And still the demons of our pity spoke:
No lips would share the lipstick of her smoke;
The telephone that rang before a ball
Every two minutes in Sorosa Hall
For her would never ring; and, with a great
Screeching of tires on gravel, to the gate
Out of lacquered night, a white-scarfed beau
Would never come for her; she'd never go,
A dream of gauze and jasmine, to that dance.

We sent her, though, to a chateau in France.

jueves, noviembre 24, 2016

una luz cegadora

en el baño haciendo pis canto una canción de silvio rodríguez, ojalá se te acabe la mirada constante, la palabra precisa, la sonrisa perfecta, ojalá pase algo que te borre de pronto, y recuerdo cómo era [yo] cuando escuchaba ese disco todo el tiempo, silvio rodríguez y pablo milanés en vivo, 19 o 20 años y estaba enamorada de r. que me llevaba en auto a casa cuando salíamos de la facultad y hablábamos de olvierio girondo, de nietzche, de alejandra pizarnik, nunca de economía y yo como una boba lo escuchaba y ahora que lo pienso el tipo era un nabo pero algo había en él de misterioso de distinto que me hacía quedarme con él conversando, en una de esas charlas me preguntó por qué no era más femenina [quién puede decirle algo así a una mujer, recién ahora me doy cuenta de esa crueldad solapada], sin embargo a lo mejor tenía razón, no me vestía muy femenina, usaba jeans muy anchos y grandes y zapatos leñadores y camisas y sweaters larguísimos o me dejaba puesto el guardapolvo de maestra jardinera, un espanto. r. me amonestaba por mi falta de sex appeal y acto seguido me contaba sus experiencias [sexuales] y yo que tenía muy poca ahí sentada ¡oh! como una tonta ¿de verdad? yo nunca... recuerdo que él tenía novia y yo estaba sola y una vez me preguntó si quería ser su amante y ¡horror! [este detalle se me escapa] le respondí que sí, pero no lo hice en el momento sino que unos días más tarde con una carta manuscrita en un papel, seguramente con pretensiones literarias y creo que se la di en un sobre indicando que no debía leerla inmediatamente salí tras él de la clase, subrepticia, sin que me viera, quería espiar qué hacía con mi carta y vi que se iba de la mano con su novia, tardó unos días en contestarme que lo había pensado y encontrado que.. no era una buena idea [una crueldad aún mayor: dar y quitar de manera arbitraria].

nunca pasó nada con r.


...

qué bien es sentirme bien.

miércoles, noviembre 23, 2016

tengo sueño.
no fui a correr.
no fui a bailar.
liquidé el torrontés.
conversé con e, besé a l.
no discuto con g.
leo a zweig hablando de Dostoyevski. me asombro.

siento paz. o algo de tranquilidad.

tres maestros

dice Zweig (en su ensayo sobre Balzac, Dickens y Dostoievski):

Cada uno de los tres aquí estudiados tiene su esfera propia: Balzac, el mundo de la sociedad; Dickens, el mundo de la familia; Dostoievski, el mundo del uno y el Todo. 

antes:

Novelista, en el sentido último y supremo de esta palabra, sólo lo es el genio enciclopédico, artista universal que ––fijémonos en la envergadura de la obra y en la muchedumbre de sus figuras–– modela con sus manos todo un cosmos; que, al lado del mundo terrenal, levanta un mundo propio, con leyes propias de gravitación, con criaturas propias y un manto propio de estrellas tendido sobre sus frentes; que sabe imprimir a cada figura, a cada suceso, un ser tan genuino, que no sólo les da relieve típico en su mundo, sino que los impone, con fuerza plástica penetrante, al mundo real, obligándonos a tomar su nombre para subrayar hechos y personas;  y así, decimos de un hombre viviente que es un figura balzacquiana, un carácter de Dostoiewski, un personaje de Dickens. 

El novelista estatuye, en el mundo de sus criaturas, una ley de vida, crea una idea de la vida, con armonía tal, que el mundo recibe por él una forma nueva.

no sé si Dios existe.

existen los novelistas.

cuando uno está mal no puede elegir bien. yo no estoy del todo bien aún. me debo el miedo, la paciencia y el tiempo.

...

suena en mi cabeza anna bolena de donizetti. es una de las óperas más lindas que escuché en mi vida. bueno, quizás no tanto como onieguin. pero recuerdo cuando la vi por primera vez en el teatro avenida (no la había investigado previamente) la música... ah la música me había deslumbrado por completo. volví al otro día. toda la semana posterior me la pasé buscando versiones, callas, beverly sills, netrebko [qué mentirosa es esa mujer en el bel canto y qué genial en verdi].  no sé por qué hoy se me ocurrió poner esa ópera. por supuesto que no me deja concentrarme para trabajar, la música es tan extraordinariamente bella.  

será por la violencia. 

"me pega porque soy fuerte y libre"

es una frase que no voy a olvidar jamás. la explicación de los maltratos. muchos hombres no toleran tener al lado a una mujer fuerte, libre y que toma decisiones. por eso después las degüellan. o las maltratan. 

...

crimen y castigo terminó y ahora siento ese vacío posterior a la finalización de una novela, extrañar a los personajes, regresar a determinados pasajes al azar, seguir con el libro por unos días en la mochila, en la cartera.  

hice una pila de novelas no leídas para elegir una para la semana próxima. hay muchos rusos dando vueltas, pasternak, tolstoi, dostoievski de nuevo, ya veré. 

...

caminamos por la calle hablando de la irrelevancia de la pregunta por la existencia de Dios. para él no es como en Dostoievski, en Los Demonios: si Dios no existe todo está permitido.

no. 

viernes, noviembre 18, 2016

desde cuándo los años
se volvieron tan cortos
el invierno tan largo
mis manos tan feas
la voz tan distante

desde cuándo
la vida tan tonta
lo absurdo tan simple
la luz
tan
oscura

desde cuándo no sé
no sabés
no sabemos

desde cuándo no puedo
decir lo que quiero

desde cuándo no quiero
saber
que no puedo

jueves, noviembre 17, 2016

billie jean

People always told me be careful of what you do
And don't go around breaking young girls' hearts
And mother always told me be careful of who you love
And be careful of what you do 'cause the lie becomes the truth

martes, noviembre 15, 2016

bailar es todo sí.

lunes, noviembre 14, 2016

crimen & castigo

pensé que iba a ser tedioso y no. por algo los clásicos son clásicos. porque siempre queremos volver a leerlos. son la milanesa con papas fritas de la literatura. comienzo sin ganas y después me sorprendo de la cantidad de cosas que se abren con la lectura, por ejemplo las asociaciones con otros libros que leí más tarde en la vida (las novelas de arlt, las de banville, los policiales de p.d james), mi situación personal cuando me acerqué a dostoievsky por primera vez, era más joven, no me había analizado nunca, pensaba que era posible leer todo, me fascinaban los personajes intricados, culpógenos, colididos [de dónde viene esta palabra, de dónde me viene].

leo sola. de las cuatro o cinco personas que dijeron que iban a acometer la lectura, sólo una de las chicas está realmente embarcada. 

...

nota mental: marcar la lista de los motivos / justificaciones del asesinato y escribirlos. 

domingo, noviembre 13, 2016

domingo a la madrugada

no puedo ir a dormir. no sé por qué.

por alguna razón desconocida estoy leyendo nuevamente crimen & castivo y no sé para qué lo hago. compruebo que la literatura rusa es agotadora y el problema de los nombres sigue ahí. dostoievsky es particularmente enfermante. no así tolstoy, o pasternak (a quién nunca leí del todo).

...

corrí hoy solamente 5 y 1/2 km. y bebí. el viernes terminé una botella de un blend tinto que habíamos abierto el jueves. hoy una copa de un malbec rosado, casi dulce, suave, agua. más tarde, después del almuerzo, hay sobre el césped unas sábanas que acomodó v. y sobre las sábanas yo despatarrada. v. cerca, tocándome el pelo con una palito chino, diciéndome cosas triviales. no tenes canas casi, qué lindo tu pelo, es natural, nunca te lo teñiste. siempre pienso que la dejaría que me toque, es decir: si quisiera acariciarme, lo permitiría. pero por favor no hables. la piel se encuentra con la piel pero no hablemos. después g. me pasa la mano por la espalda, por debajo de la remera. me quedo quieta. sintiendo.

--antes, mientras comíamos, escuchaba las idioteces que decía a. sobre macbeth, shakespeare en general, scott fitzgerald. no tiene idea, no es que yo sepa mucho, no sé nada tampoco, pero a. necesita explicar que alguna vez leyó tal o cual libro, o tal o cual autor, como cuando preguntó por ortega y gazzette, sí, así, v. no para de burlarse y decir que lee todo en google. me río y disimulo tomando más vino, no es cuestión de ofender al dueño de casa--

...

en la semana conocí a agustina. es más joven y linda de lo que imaginaba o por lo menos de lo que ella se empeña en sugerir. me contó historias de violencia en su familia. le conté las mías. en un momento hablamos de mujeres. de estar con mujeres. le pregunté si le gustaban. dijo que sí.

...

almorzamos el viernes. es curioso, nos encontramos en la calle, puntuales y es como si hubiéramos almorzado miles de veces y creo que sólo nos vimos dos o tres. los hijos, el trabajo. el arte. las mujeres. de nuevo. hablamos y parece que tuviéramos confianza. pregunto cosas. conversamos sobre los recuerdos, crear recuerdos. suelto alguna estupidez sobre stendhal y las crónicas italianas.
p. me dice que no le gusta volver a los lugares en los que ya estuvo.
y si te gustaron?
más aún. o mejor dicho: menos aún. hay un temor a que las emociones, las percepciones no vuelvan a repetirse, que no sean diferentes, ya no va a ser lo mismo. no le gusta volver. a mí sí me gusta volver. siempre que dejo un lugar lo dejo pensando que voy a regresar (no importa si después se cumple). con las personas me pasa lo mismo. a lo mejor es una manía, una negación de la finitud de las cosas, de las relaciones: creer que uno va a volver es creerse un poco eterno.
...
comí todos los macarrons esa misma tarde.

domingo a la madrugada

no puedo ir a dormir. no sé por qué.

por alguna razón desconocida estoy leyendo nuevamente crimen & castigo y no sé para qué lo hago. compruebo que la literatura rusa es agotadora y el problema de los nombres sigue ahí. dostoievsky es particularmente enfermante. no así tolstoy, o pasternak (a quién nunca leí del todo).

...

corrí hoy solamente 5 y 1/2 km. y bebí. el viernes terminé una botella de un blend tinto que habíamos abierto el jueves. hoy una copa de un malbec rosado, casi dulce, suave, agua. más tarde, después del almuerzo, hay sobre el césped unas sábanas que acomodó v. y sobre las sábanas yo despatarrada. v. cerca, tocándome el pelo con una palito chino, diciéndome cosas triviales. no tenes canas casi, qué lindo tu pelo, es natural, nunca te lo teñiste. siempre pienso que la dejaría que me toque, es decir: si quisiera acariciarme, lo permitiría. pero por favor no hables. la piel se encuentra con la piel pero no hablemos. después g. me pasa la mano por la espalda, por debajo de la remera. me quedo quieta. sintiendo.

--antes, mientras comíamos, escuchaba las idioteces que decía a. sobre macbeth, shakespeare en general, scott fitzgerald. no tiene idea, no es que yo sepa mucho, no sé nada tampoco, pero a. necesita explicar que alguna vez leyó tal o cual libro, o tal o cual autor, como cuando preguntó por ortega y gazzette, sí, así, v. no para de burlarse y decir que lee todo en google. me río y disimulo tomando más vino, no es cuestión de ofender al dueño de casa--

...

en la semana conocí a agustina. es más joven y linda de lo que imaginaba o por lo menos de lo que ella se empeña en sugerir. me contó historias de violencia en su familia. le conté las mías. en un momento hablamos de mujeres. de estar con mujeres. le pregunté si le gustaban. dijo que sí.

...

almorzamos el viernes. es curioso, nos encontramos en la calle, puntuales y es como si hubiéramos almorzado miles de veces y creo que sólo nos vimos dos o tres. los hijos, el trabajo. el arte. las mujeres. de nuevo. hablamos y parece que tuviéramos confianza. pregunto cosas. conversamos sobre los recuerdos, crear recuerdos. suelto alguna estupidez sobre stendhal y las crónicas italianas.
p. me dice que no le gusta volver a los lugares en los que ya estuvo.
y si te gustaron?
más aún. o mejor dicho: menos aún. hay un temor a que las emociones, las percepciones no vuelvan a repetirse, que no sean diferentes, ya no va a ser lo mismo. no le gusta volver. a mí sí me gusta volver. siempre que dejo un lugar lo dejo pensando que voy a regresar (no importa si después se cumple). con las personas me pasa lo mismo. a lo mejor es una manía, una negación de la finitud de las cosas, de las relaciones: creer que uno va a volver es creerse un poco eterno.
...
comí todos los macarrons esa misma tarde.

miércoles, noviembre 09, 2016

ganó trump.

krafterk [quiénes son, quiénes eran] no pueden tocar en buenos aires porque se los considera peligrosos. por las drogas y eso.

abrí el libro de cuentos que compré en strand. leí dos. son historias publicadas en el new yorker durante la década del 50. pleno baby boom. no sé si me gustaron. no sé si les presté atención porque a nada puedo prestarle atención. en realidad una me pareció muy buena, la de dos púberes que se juntan en la casa de uno de ellos para espiar a una pareja de recién casados teniendo sexo en la noche. por supuesto los muchachitos nada saben de esas cosas, esperan aprender. se preparan minuciosamente [llevan sus binoculares, un paquete de caramelos, dos baúles sobre los que se encaraman para ver mejor, conversan sobre el asunto, etc]. creo que sí, que se trata de un buen cuento: hay tensión, los personajes se entienden en una pincelada, uno espera, como los púberes, que sucedan cosas en esa habitación. mientras leía pensé qué diferente es a mirar pornografía en internet, a espiar gifts con pedacitos de sexo que están ahí nomás. la tensión, por supuesto, no se resuelve. y eso me encanta, que quede todo suspendido, como a punto de caer.

...

ahora me indican que lo mejor es hacer de cuenta que algo que existe no existe así entonces, ojos que no ven corazón que no siente. a ulises lo atan a un mástil [o pide que lo aten] para no arrojarse al mar cuando le cantan las sirenas. bueno, algo parecido.

pum. pum. pum.

me quedé 15 de los 23 minutos que dura piano phase de steve reich escuchando y en un punto se transforma en un ruido más de mi alrededor, como el de un motor que ronronea, o el zumbido de la ventilación, las teclas de las computadoras aledañas. una sucesión de sonidos que se repiten y a fuerza de hacerlo pierden toda su belleza/sorpresa inicial.


lunes, noviembre 07, 2016

hoy es el día del aniversario del casamiento de mamá y papá. cuántos años hubieran sido?
qué lástima mamá, que te fuiste.

el color de la luz de sodio es amarillo

hoy sí vine dispuesta a hacer todo prolijamente.

pero es inevitable: hay un horario de la tarde en el pierdo toda esperanza de concentración e infrinjo. el otro día un soneto, o varios, cuanto más tedioso es el trabajo, más ganas me dan de ponerme a escribir. el domingo [ayer, durante la cena] le digo a ezequiel que lo entiendo: estar en la escuela, obligado a permanecer quieto en un lugar, en silencio, escuchando explicaciones de algo que no le interesa. yo igual. y ni siquiera está bien visto decir: esto no. NO ME GUSTA. ¿por qué no podemos decir qué nos gusta y qué no?

igual me dejo de joder cuando hablo con otra mujer de mi edad que está aterrada también por perder el trabajo: en el zaguán de su casa exponemos el caso de personas de nuestra generación que trabajan en multinacionales y saben que, de alguna manera, a los cuarenta y pico se termina todo: te rajan a la mierda y chau.

ya es de noche y los chicos nos piden que dejemos de hablar.

...

los poemas de laura wittner son un descubrimiento maravilloso.
por ejemplo:

creo que si ponemos
una lámpara de sodio
en el centro de esta pieza oscura
acá en el piso, digo, y vos de un lado
y yo del otro, un día, en unos años
nos explicamos todo
despacio, con algunas palabras
que alcancen sin sobrar
el rato que haga falta
que entonces así, tal vez
el amarillo
como único núcleo
calmante pero sólido
nos deje poner orden
en todo este bigbang.

viernes, noviembre 04, 2016

fui a la reunión. tosí toda la noche anoche casi escupo el alma no pude dormir. tuve una charla. me quedé más tranquila. bueno no tanto. papá me dice que me deje de joder. que ahora me ponga a trabajar y deje de especular.

necesito hacerme una nebulización.

jueves, noviembre 03, 2016

cosas que pasan en la cama

¿compraste forros? sí! ¿tenés bombacha?
vine sin nada como a vos te gusta
sólo perfume: la cantidad justa
qué lindo, corazón, yo afilé el hacha

¡estás mojada! (sí) vení dejame
besarte el cuello, pellizcarte toda
yo sé muy bien que a vos no te incomoda
me calentás ¿sabés? ahora chupame

qué rico estás, mirá, me volvés loca
mirá cómo te muerdo de a poquito 
--el dedo ahí me encanta, suavecito--
ah! tu caudal llenándome la boca

¡uy! ¿se murió? no importa: va de nuevo

nunca me canso de jugar tus juegos

ya no duele.

miércoles, noviembre 02, 2016

¿compraste forros? sí! ¿tenés bombacha?
vine sin nada como a vos te gusta
sólo perfume la cantidad justa
qué lindo, corazón, yo afilé el hacha

¡estás mojada! (sí) vení dejame
que te improvise el cuerpo con las manos
dejame hacerte inviernos y veranos
me calentás ¿sabés? ahora chupame

qué rico estás, mirá, me volvés loca
mirá cómo te muerdo despacito
--el dedo ahí me encanta, suavecito--
ah! tu caudal llenándome la boca

¡uy! ¿se murió? no importa: va de nuevo
nunca me canso de jugar tus juegos