miércoles, enero 31, 2007

releí palabras del pasado y no sé o si sé por qué: a llorar. es decir, cosas de mamá, de amor, cosas de duelo anticipado y todavía no concluido, cosas de tristeza.

también pude encontrar a la desmesurada bronca que desparramé sobre las personas que, de alguna forma tal vez inmerecida, hoy me reconocieron. vos sos vos. yo... ¿soy yo?

...

aparte, es curioso y de notar un gerente que ante los socios habla todo que sí, ante sus pares, habla todo que no. siempre con la misma insípida tonalidad, el anteojito bordeando la nariz, el peluquín teñido pa' disimular cuestiones que el tiempo se niega a perdonar, un infaltable reloj caro, etc. en fin: un boludo.

hay otro, por ejemplo, a quien más cabe llamar muchísimo peores y feos nombres porque acosa a la gente preguntándole cosas que él no desconoce con el sólo fin de originar un trastabillo, o trastabille que lleve a la persona a caer con estrépito y verguenza mientras él afirma victorioso: ¿viste que no lo sabías?

así resulta ser la viña del señor, o mejor dicho, el ambiente empresarial que no difiere mucho de otros ambientes de humana participación.

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tengo sueño. estoy considerando volver a escribir crónicas.

...

jueves, enero 25, 2007

...y esto es la existencia, ¿comprende?, alguien que a primera vista no reconocemos
(o no reconocemos nunca)
que nos besa y se nos escapa dejándonos en tinieblas hasta que subimos los escalones a duras penas, vacilando, pensando, regresamos a casa y la llave que no entra en la cerradura porque nos equivocamos...

a.l.antunes.

y yo (es decir, jimena): silencio

martes, enero 16, 2007

sucede el relativo y profesional éxito que no se divulga, que mejor no, que si la camisa queda grande o los zapatos apretados (en el peor de los casos casi siempre la sensación de grande y apretados nada más) sería preferible no salir a escena: horror al si bemol en el lugar del si natural.

relativizar es solapar, quizás, la acechanza del miedo. como, por ejemplo, cuando la persona --el problema vuelve, ese de la comunicación-- no contesta porque no contesta. es decir, a la persona se le habla y esa misma persona a quien se le habla con variaciones infinitas en el tono, las palabras, los momentos
(porque el mensaje es más o menos uno y siempre igual
quiero saber
quiero saber
quiero saber)
pega, sin escuchar, sin un gesto de escuchar siquiera, la media vuelta y a otra cosa. uno entonces: ya pasará, ya lo sabré.

uno restando importancia donde suma angustias.

más tarde algo parecido a un quiebre, una piedra rompiendo los bordes del agua, una hoja cayendo amarilla, no sé, y todo va despacio regresando a su lugar.

miércoles, enero 03, 2007

estuve en málaga

una vez, había un minotauro
dibujado
y un lugar subido que no sé
¿cuál era el nombre desde donde se veía el mar?
¿un círculo?
¿paredes?
hoy vienen tan poquitas las palabras
(las lágrimas de a muchas
de a tanto que no importan
o ya no recuerdo)


me soñé en el vientre gigantesco de la noche
un vientre
(el mío)
enorme y brazos y patadas
me soñé
con hijos en el cuerpo nuevamente