qué espanto las noticias que llegaron
no sé qué hacer con ellas, sólo verlas
pasar frente a mis ojos (se anegaron
con lágrimas enormes como perlas)
y bueh, al final la muerte viene en cuotas
mejor me ocupo de lo que me apremia
no sea que me agarren en pelotas
antes de que termine la pandemia
número uno: amasijar el piano
(que suene, aunque parezca cualquier cosa)
número dos: abrazo lo posible
(no puedo proseguir. es muy temprano
y escucho repetir la desastrosa
variación sobre el tumor horrible)